23 noviembre 2014

Torta de ricota II



En una ocasión ya os conté aquí el significado que tiene esta torta para mí.Hoy os traigo una manera diferente de hacerla, más fácil, y en sólo cinco pasos, es deliciosa.
No es una "Torta" cualquiera, para mi familia y para mí es "La torta".Es de esas elaboraciones que planeo con tiempo, que me hace salivar desde el momento en que me arremango y entro en la cocina, hasta emocionarme en cada paso a paso de su preparación.
No puedo dejar de pensar en mi abuela, en mi tía, en mi madre, en los momentos y en la vida que transcurrí con ellas en la cocina, ese lugar mágico que siempre fue para mí.
La cocina fue siempre nuestro punto de encuentro, un lugar casi íntimo dónde nos despojábamos de todo, cocinábamos más que platos, historias. A través de nuestras elaboraciones, de entre kilos de harinas, cientos de docenas de huevos, de sabores y olores, de texturas, de manos entremezcladas amasando, fuimos hilvanando nuestra propia historia, abriendo puertas y ventanas, tejiendo puentes entre nosotras.En la cocina el tiempo se detenía, no pasaba, todo se cocinaba a fuego lento, pero esos momentos quedaron en mí grabados a fuego fuerte, esos recuerdos me envuelven, me acompañan, me empujan a seguir cocinando mi vida, a veces con nostalgia.
Nuestros corazones quedaron sellados allí para siempre, en esa hoy lejana cocina, a pesar de alguna ausencia y de la distancia.
Y por supuesto no podían faltar los mates alrededor de nuestra Torta....


Ingredientes

Para la pasta de mantequilla

180 grs de mantequilla, a punto pomada
120 grs de azúcar
1 huevo
1 pizca de sal
Ralladura de 1 limón

Para la masa

370 grs de harina
2 cdas de polvo de hornear
1 pizca de sal

Para el relleno

600 grs de Ricota
200 grs de azúcar 2 huevos
2 cdas de almidón de maíz
Ralladura de medio limón
Esencia de vainilla

Elaboración en cinco pasos

1º- Batimos la mantequilla hasta que nos quede una crema blanca, luego incorporamos el huevo, la ralladura, la pizca de sal y el azúcar, seguimos batiendo hasta que el azúcar quede bien integrado.

2º Mezclamos la harina con el polvo de hornear y la pizca de sal, con el fin de realzar el sabor.
Volcamos la harina a la mesa de trabajo, formamos un volcán y en medio ponemos la Pasta de mantequilla.Con las manos y muy suavemente iremos mezclando la pasta con la harina e iremos formando grumos con las yemas de los dedos, hasta convertir la masa en un arenado.

3º Hacemos el relleno colocando en un cuenco la ricota, la sal, el azúcar, la ralladura de limón,la esencia de vainilla los huevos, el almidón de maíz.Mezclamos todo bien hasta obtener un relleno liso.

4º Armamos la base en un molde de 24 cm de diámetro enmantecado.
Colocamos en el 3/4 partes del arenado que tenemos formado y lo vamos repartiendo bien, por toda la base y paredes del molde, para eso nos ayudamos solamente con la yema de los dedos, con cuidado y presionado, hasta que nos quede el molde forrado con la masa que nos quedará compacta.
Volcamos el relleno y alisamos la superficie.
Con el resto del arenado cubrimos la superficie como si se tratara de un crumble.

5º Hornear a temperatura media, en mi caso 170º durante 40 minutos.




Espero os guste, Feliz Domingo!!

La receta es de Cocineros argentinos.

10 comentarios:

  1. Silvia, cómo me gusta verte por aquí. Esa torta tiene una pinta increíble, superhúmeda, supercremosa... tiene que ser rica. Y lo que más me gusta es todo lo que lleva alrededor. Esas son las mejores recetas.Besos

    ResponderEliminar
  2. Me encanta!!! No me extraña que os guste tanto!!Que pasada!!Y así tan fácil!Tendré que probarla!! =)

    ResponderEliminar
  3. Con estos ingredientes y tantos recuerdos y familiares presentes con nosotros aunque desde el cielo, esta tarta sólo puede estar riquísima. En ITalia probamos varias versiones de una tarta muy parecida y cada una tenía su gracia.
    Besos y feliz semana,
    Palmira

    ResponderEliminar
  4. Que historia más bonita, a pesar de la nostalgia está llena de sentimientos que en definitiva es lo que queda. Una torta que a primera vista parece deliciosa, no me quiero imaginar la sensación que deja en el primer bocado. Besos!

    Ana

    ResponderEliminar
  5. Esto lo pruebo si o sí, con lo que me gusta la ricotta, en cuanto la prepare te digo que tal. Besote Silvia!!

    ResponderEliminar
  6. Por favor...esta torta tiene todo el sabor que uno puede desear, y además con ese crumble de mantequilla, no encuentro casi nada más adictivo que tus quiches y esta torta que tengo ya enfriando lista para probar mañana...ha sido un día intenso, pero lleno de detalles bonitos, uno de ellos, tropezar siempre con tu cariño y tus recetas Sil.

    Un abrazo enorme Diosa!

    ResponderEliminar
  7. Ya tengo todos los ingredientes!!! en cuanto se largue la lluvia (que bajaría el calor...) pongo manos en la masa y tengo compañia para el mate de la tarde. Besotessssssssss!!!

    ResponderEliminar
  8. Silvia, impresionante de buena! y la he preparado en 15 minutos, tenía justo el tiempo para hornearla, así que me he dado prisa :-) Deliciosa. Gracias por la receta!

    ResponderEliminar
  9. Hace diez años que no como una torta de ricotta. Y cuando vi tu receta (estaba buscando la receta del matambre) me pregunté por qué estuve tantos años sin comerla; había olvidado cuánto me gusta y vos me lo recordaste. Está en el horno ahora mismo, ya me comí los restos de relleno del bowl y de la batidora y puedo asegurar que va a salir maravillosa, tiene el exacto sabor de mi ciudad, de mi barrio, de mi infancia. Te agradezco de corazón.

    ResponderEliminar

Muchas gracias por tu visita, por dejarme un comentario,que me alegra y valoro enormemente.
Si tienes dudas,no entiendes algo,no dudes en preguntar,contesto siempre,de modo individual a través del correo.Acepto sugerencias que me ayuden a mejorar.
Gracias por pasar por mi cocina,aunque lo hagas en silencio ;))

Cariños