Tarta de queso ricotta y manzana

Si me preguntaran cual es mi ingrediente fetiche, seguro contestaría, la ricotta. Hay momentos en los que siento que merezco darme un homenaje con algo especial, y no se como y porque aparece por arte de magia a mis manos, alguna receta que lleve mi ingrediente deseado.
Me gustan las tartas de queso en todas sus combinaciones y quesos, con una base de masa quebrada, con una de galletas, sin base, horneadas o no.
Barcelona está que arde, que calor tan insoportable estamos teniendo estos días nuevamente, y esta humedad que lo hace aún más aplastante.Van transcurriendo los días y yo esperando con ansias el otoño.
Pero el deseo le ganó el pulso a mi desgana por encender el horno, y esta tarta es el resultado.

Ingredientes

Para la base

200 gr de galletas de soja y manzana
80 grs de mantequilla
50 gr de nueces


Para la tarta

4 huevos
500 gr de queso ricotta
1 manzana
400 ml de nata 35% MT
170 gr de azúcar
2 cucharadas de harina tamizada
1 cdita de vainilla en pasta

*Gelatina de manzana

*Nota:Al final de la cocción la pincelé con gelatina natural de manzana, tenéis la receta AQUÍ. Vosotros podéis darle un toque con mermelada de manzana o con lo que guste.

Elaboración
Para un molde desmontable de 22 cm

La base

Trituramos las galletas junto con las nueces.Derretimos la mantequilla.
En un cuenco mezclamos todo, nos quedará una arenilla de galletas, la extendemos por toda la base, emparejamos bien y la llevamos a la nevera.

Para la tarta

Pelamos la manzana, descorazonamos y cortamos en láminas muy finas.
Batimos los huevos con el azúcar y la vainilla.Añadimos la nata y las dos cucharadas de harina, mezclamos con unas varillas manuales.Incorporamos la ricotta, mezclamos bien hasta que no queden grumos.

Montaje de la tarta

Retiramos nuestra base de galletas de la nevera, cubrimos toda la superficie con las láminas de manzana.
Volcamos la crema de ricotta y horneamos.
En mi caso la temperatura del horno fue de 165 º, le llevó 1 h 35 minutos y la cubrí con papel plata.
Retiramos la dejamos reposar 10 minutos, desmoldar y enfriar sobre una rejilla.
Una vez fría pincelar con la gelatina de manzana.

Ya veis una tarta sencilla, con ingredientes ricos en si mismos, que combinados entre si dan por resultado una tarta cremosa, crujiente y suave a la vez.La manzana entre medio de las capas de galleta y la crema de queso le aportan una textura húmeda sin perder su base crujiente.
Os animo a elaborarla, es más larga de explicar que de hacer.

Que la disfruten, feliz semana!